jueves, mayo 23, 2019

Hoy... nuestro tiempo



El “hoy antihistórico”
en su seno porta latente
un “hoy histórico” que
necesario construirá en
el mañana necesario la
vida humana histórica del
hombre histórico necesario
pero hoy en la existencia
domina lo “antihistórico”
…pero el parto ocurrirá!

El sembrador/José Vela Zanetti
Cantan y cantan las chicharras
realmente verdaderos gritos
hasta el ensordecimiento
¿dónde anda el invierno?
¿quién quienes lo retardan?
igual gritan las semillas porque
ya sienten la necesidad de abrir
sus verdes pálidos cotiledones
como el corazón su necesidad
de liberar la fuerza del amor

Y también los ríos los mares las nubes
las esencias del corazón del hombre
porque sus cauces sus lechos su alma
necesitan de las aguas para sostener
sus vidas hambrientas de vidas
¡gime toda la tierra sedienta
porque necesario calmar su sed
y resucitar sus “muertos”!

Y a este caos por rupturas de
la armonía y el equilibrio que
causa la acción del hombre
les siguen otros como ocurren
en las nubes que desatándose
amenazan soltar sus tempestades
y las estaciones igual se trastocan
ya no sabiendo quién sigue a quién
¿y después del invierno le seguirá
la primavera renovando la vida?
¡hoy todo anda trastocado!

Y el viento se pone a soplar al revés
a veces quedándose sobre las montañas
otras veces posándose en el intranquilo mar
y sabe que deteniéndose agotará sus fuerzas
 y no podrá continuar soltando a sus brisas y
siente muros gravitacionales que le detienen
¡cuántas polinizaciones quedarán truncadas!


Y el sol tan puntual se levanta
con su cesta sembradora de energías
pero bosques ríos lluvias nubosidad
ahora ya no están para regular el clima y
suéltense de improviso fuerzas extrañas que
apuran su paso sin poder parar en su cénit y
sin freno va romper sus ocasos sobre el mar
sin ningún tiempo para repartir sus gamas
aflorando el dominio de las penumbras
¡equinoccios de primaveras apenas
gestando sus vidas primaverales

Y la atmósfera trastocándose
entre sus capas impidiendo a
la tropósfera regular sus vientos
que ya no es tamiz de las luces y
casi libre deja subir y bajar
caudales de gases invernaderos y
caer sobre la vida lluvias ácidas
¡las albas dejan de ser rosas
ensombreciéndose sus perfiles!
entonces ¿ya no habrá mañanas
bañadas en luces de auroras?
  
Y el hombre afanado sigue su labor
pero confundiendo los horizontes
con su espalda curva sobre la tierra
su sudor ácido agrietando los surcos
mientras se oye aquella voz milenaria
¡con el sudor de tu frente ganaras la vida
deambulando exilado por toda la Tierra!
y ahora su corazón va lento muriendo
porque la fuerza del amor ya no lo anida

El sudor/José Vela Zanetti/1989
Y este amor aunque inquieto aún
muestra la serenidad de su rostro
vestido con su sonreír de porvenir
esperando a la veda de esos horizontes y
aún reteniendo en sus manos la esperanza
fructicultora que sabe habrá de entregarse
a aquél hombre que se labra en los surcos
desenredando a los mismos horizontes

Y todavía de los agujeros negros
no cesan oírse aquellas mismas voces
eh! eh! quién anda allí por los bordes…!
…aquí en los abismos todavía estamos!
¿acaso no ven nuestros resplandores…?

Y oyese agolpados palpitares de corazones
pugnando semejando a aquellas tormentas
ya en furia desatándose como cuenta
la mitología con su “caja de pandora”
…y ahora cómo tardan las albas
vestir sus tonalidades sonrosadas
aunque aún siguen anunciando que
pueden abrirse en sus auroras

Y hombre! ya no cargaré más tu historia
tan pesada cruz que lleva a la crucifixión!
y en silencio lucharé por labrarme como
la piedra cuarzo que se va construyendo
a pasos bañándose en sus luces sepias
manifestando feliz su vida perfecta
…y con una edad tan antigua
¿por qué también tú no lo logras?

Cuarzo sepias
Y anidamos en las alas de la alegría!
aún en la pluma que la violencia obliga
refugiarse en un rincón de la tristeza…
Ediciones jaced---------------------