¡Oh vientre sol de
luces
del nacimiento!
para dar a luz
al niño
la simiente que germinará
para dar a luz
al hombre quien
deberá crear la historia para
dar a luz a la
sociedad del
hombre hermano del
hombre
vivir la vida de la oda de la alegría
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| Maternidad y amor/Margarita Sikorskaia |
Para dar a luz
la vida naciendo de
la vida
tan diversa multiplicada en partos
de amor para hacerse
más diversa y
llegar a la creación de la naturaleza
viviendo siempre en maternidad
para que el pájaro cante ¡soy pájaro!
el hombre cante soy
hombre ¡humano!
Yo tú él ellos o
nosotros vosotros
en alegría conjugando el verbo nacer
hijos de hijos en
la cadena de la vida
alumbramientos de
la madre como
botones originarios del Universo
que en su seno ponen a la vida vivir
¡El espectáculo de
la naturaleza
viviéndose en la
fantasticidad
de lo maravilloso
de su existencia!
yema en el tallo forestándose a flora
o botón
abriéndose en flor luego a fruto
gestando semillas
para su arborización o
aurorales fiestas de las flores que montan
los polinizadores transmutando sus pólenes
o la sustancia
agua brotando de la química
un átomo de hidrógeno con dos de oxígenos
sembrado en los surcos de la existencia viva
para que siempre sea agua fuente de la vida
O el poema la
madre da a luz narrando
al solista óvulo sembrado en el útero
en bella aventura gestándose en niño
hasta llegar a los ansiosos brazos de
la madre donde recibe el primer beso
envuelto en su cálida voz de amor y en
su boca la vianda de leche de sus senos
¡qué asombro de la
vida brotando de la vida!
Pero ¿cómo es
posible que ese niño del amor
luego ha de mutarse
en ser de la violencia?
¿quién o quiénes truncan
tan hermosa aventura
o rompen el bello
ciclo que inaugura la vida?
pero ¿cómo evitar
que siga tal acontecer?
¡El niño nace a la luz!
¡qué alegría!
¡aleluya! estallan
júbilo voces de la vecindad amiga
casas retumbando de casa en casa
comunicándose la buena
nueva o
caminos corriendo por los caminos de
pueblo en pueblo llevando la noticia
como pequeñas fogatas de alegrías
Y así la madre protagonizando el
asombro del acontecer nacimiento
¡doña Luna parió su niño y niña luna!
¡Carmen Susana
parió sus anhelados niños!
¡Carmen Ramona
parió sus niños soñados!
¡Andrea ha parido
sus bellos hijos!
Lourdes tuvo sus queridos
hijos
la madre eterna pariendo la semilla
de la historia para
que fructifique
hijos de hijos creando al hombre
que en verdad ame al hombre
pero ¿lo hacen?
¿lo harán?
Como las flores en fiesta polinizándose
también la madre pariendo en el universo
que se estremece por el nacer de la vida
¡oh madre gestadora
de maternidad!
Y todavía tu niño no es verdadero hijo
por el solo hecho de ser parido pero
sí lo será cuando salga airoso de los
contratiempos de la asediante violencia
conservando intacta su autenticidad de hijo
como la prolongación del amor que lo gesta
¡hijos de los puros
actos originarios del amor!
pero en este tiempo ¿llegan
a serlos?
¡El amor! esa fuente forjadora donde constante
se conjuga el verbo
amar en todos sus tiempos
como la sucesión de olas creando doradas playas
el botón alegre abriéndose a flor para ser fruto o
el óvulo en
odisea gestadora para crearse en niño
¡Oh hermoso niño exitoso
en su aventura!
siempre aprendiendo jugando en algarabía
como ese vigor desenvuelto de las cataratas
desprendiéndose desde alturas olímpicas y
con el despliegue de su libertad originaria
llegar a la transmutación de estaciones
para hacerse madre
o padre o hermano
¡función histórica
verdadera del Ser
tallada en esa fuente del amor permanente
para llegar a la fundación de humanidad!
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| El niño del pájaro/Pietri Paúl Rubens |
Y gritamos ¡qué milagro
de la vida!
en abanico las edades
bullentes de porvenires
la niñez surtidora de las esencias originarias
de la libertad amor verdad belleza justicia que
vemos en cada niño cuando ríe
juega llora o ama
repartiéndolas por doquier
en cápsulas de alegrías
La juventud edad arroyo de
aguas germinantes
despeñadas en despliegue de energía e inventiva
regándola al mundo en torrencial abundancia
almacén de proyectos-vidas como sembradíos
fructificándose hacia un hacer humanidad
Y de ese arroyo que se hace deltas brotará el
adulto que recogiendo la cosecha del sembradío
en su madura vida la llevará a su realización
construyendo los cimientos de la sociedad
como el real paraíso de la vida
Y en ese paraíso donde cada quien tiene lo suyo
el ocaso esplendor de crepúsculos otoñales
la vejez melancólico remanso de ejemplos
como ofrenda que se destila en dulzuras
en fuente generosa de consejos enseñanzas
para todo sediento que quiera llegar a beber
¡el abuelo fuente
de saberes cuentos y cantos!
¡Oh ancianidad!
la otra fuente del Nacimiento
edad dorada reposo apacible
donde la violencia ha sido extinguida
aprehendido el amor la belleza y verdad
para ofrendarlo a todo aquél que quiera
el terminal del ciclo de la vida productiva
y por esa senda llegar a la plácida muerte
¡el gran ideario
del hombre a humano!
¡Lo humano qué
grandioso árbol!
hermosa cuatricromía de las edades
para quien es necesario el nacimiento
de la simiente luz
el niño que en
crescendo crea al hombre y mujer
pero como Ser humano verdadero
en ovillo tejiéndose destejiéndose
hasta llegar al cuerpo
humanidad
¿Pero en este
tiempo en esta sociedad
realmente es lo que
viene ocurriendo o
solo acontece la
violación permanente
y flagrante de esa
condición humana
que desde su
nacimiento trae el niño
para transustanciarla
en lo humano?
Queda obstruido el gestar de lo humano
porque nuestro tiempo gesta una vida
que llega construirse en gran tragedia
la muerte la necesidad de su violencia
acontecer terrible en la existencia que
convierte al nacimiento en surtidor
de desechos o despojos humanos
Entonces necesario otro volcán de la vida
que haga erupción en otra nueva necesidad
que desarrollada restaure ¡el nacimiento!
como la ofrenda original del Universo
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| Tres niños bailando |
¡Oh nacimiento!
de la vida en la vida y
plácida llegar a la muerte
haciéndose fuente de la vida
el ciclo dialéctico
vida-muerte
envuelto en oleajes de alegrías
en sucesión infinita dentro de lo finito
porque las obras de la vida son realizadas
como el bello otoño entregando sus semillas
hojas pétalos a la tierra para su resurrección
y otra vez volver a nacer infinitas veces
en los tallos de la flora ¡florestándose!
O dentro del paciente invierno donde
la vida solo parece dormir pero viviendo
gestándose la bella durmiente
la primavera que despierta
en
cada ser vivo como en la yema
capullos originarios para abrirse
en crescendo hasta serse
flora
abrazando en sembradío a la tierra u
Hombre! quien viviendo crea lo humano
para hacer advenir
ese momento cumbre
donde la vida libera su vivir pleno
como un canto dulce de trompeta
