lunes, noviembre 09, 2009

Amor de cerdito

Y este “diálogo”, aunque le parezca extraño, ya viene ocurriendo a nivel de la ciencia médica. Tejidos de su cuerpo son tomados para hacer injertos que ayudan a reconstruir órganos del hombre. Así que fisiológica y anatómicamente ya este “amor” se ha venido tejiendo. Y de este “amor” - ¿y por qué no?- lo que es implícito bien podemos explicitarlos, y pasar a imaginarnos una mutua “vida social”: un ejercicio de imaginación literaria para dejar sentada una moraleja de convivencia. Entonces, dejemos que laranaverde sienta ese placer, y suelte su “loco” imaginario.




Hey! hey!
oye tú!
hey hombre!
¿qué haces allí en esa vida tan incómoda?
Ven para acá
ven a vivir conmigo
que aquí en este hogar
los muros son más bajos que los tuyos
podemos juntos saltarlos
cuando queramos
y el sol podemos ver
y recibir la lluvia traída por la brisa
aquí podemos disfrutar más libertad

Ven a mi vida
menos dura que la tuya
y aquí busquemos
un rincón solariego
y bajo el paragua del sol
juntos leeremos
en el libro del hombre
lo que allí se escribe
solo para nosotros
para los que quieren vivir

Y después de leer
como hizo el Quijote
con sus libros andantes
salimos juntos
unidas nuestras fuerzas
en amor solidario
a derrumbar todos los muros
altos medianos y bajos
y debajo de sus ruinas
rescatar al niño que fuimos


Y juntos
otra vez unidos en amor
otra vez a la faz de la Tierra
otra vez a nacer
otra vez empezar
juntos la vida
como el Quijote aquél
pero esta vez
sin extraviarnos
como a él le ocurrió
y otra vez volver a Ser